Como diría un viejo refrán, “en todos lados se cuecen habas” claro, con el contenido de lo que en muchos de los casos las frases refieren, partiendo casi siempre de experiencias de vida, significativas y ciertas, por eso también les dedicaremos un espacio ESPECIAL en esta editorial, porque el tema del que vamos a hablar, ocurre a distintos niveles no solamente en nuestro país sino también con nuestros vecinos, en las más altas esferas, pero les daremos en esta ocasión, un tono muy nuestro.
En este contexto el caso Donald Trump, ex presidente de los Estados Unidos, es digamos una referencia del más alto nivel de lo que puede ocurrir en la política en tiempos electorales o de acomodo en las parrillas de arranque. Es decir, cuando se acercan los tiempos de ir perfilando contendientes, alianzas o posibles candidatos a un cargo de elección, más aún cuando los personajes como en este caso, tienen PESO público y representan una preocupación presente o futura en cargos de elección.
En ese sentido y en particular se ha referido el propio presidente Andrés Manuel López Obrador, cuando ha calificado el caso Trump, como una “degradación de la seriedad”, además de no fabricar delitos para afectar adversarios, y que estos estaban motivados e impulsados por temas de carácter político-electorales. Lo que sin duda tiene una MOTIVACIÓN y fundamento importante por lo que este personaje representa para las próximas elecciones en su país en el 2024. Es decir, les preocupa que llegue LIMPIO a esa contienda, por lo que lo han vinculado con tema de sus relaciones con una actriz de cine para adultos que ocurrió en el 2016, en su campaña.
Sin embargo, sabemos que aquí en nuestro país, estado y territorio, “no cantamos mal las rancheras”, volviendo a lo de las frases que siempre ilustran, en donde la creatividad se pone a prueba y lejos, pero muy lejos de la INTELIGENCIA artificial en donde aparecen policías haciendo una detención espectacular, aquí se las ingenian para engañar. Claramente con un modelo de “INTELIGENCIA” a un nivel de planta baja, más local, haciendo declaraciones, abriendo expedientes, montando espectáculos penosos en lo jurídico, pero que pretenden meter ruido, porque también suenan las campanas de 2024. A este efecto también se le llama MIEDO.
Los motivos son muchos e imaginativos en casi todos los casos, con falta de fundamentos y de una terrible creatividad. Se trata de meter MIEDO o de que ellos lo tienen, no miden y nos les importa exponer a terceros o exponerse a sí mismos como abogados, por su causa no es un tema real de justicia: es un encargo para manchar, detener e inhabilitar contendientes, esa es su misión, ese es su objetivo, trabajan para grupos o intereses políticos, que solo falta verles el origen para encontrarles el truco, ya sea del pasado, pero también del presente y del futuro. Les preocupa esto profundamente.
La gente lo sabe, los lee, los reconoce, no la engañan, persiguen y “en el pecado llevarán la penitencia”, la ciudadanía los estará juzgando a ellos. Ese sí es el JUICIO más importante con inteligencia real.
Con esto podemos decir hablando del MIEDO y hasta en tono hilarante que “el miedo no anda en burro” hay ocasiones de verdad que hasta el señor burro nos tendría que disculpar por la fama que le han hecho y que también se convierte terriblemente en el ejemplo más claro que como contra frase que “el miedo Sí anda en burro” y de los buenos, capaces de llevar a cuestas mentiras ridículas, estrategias sin fundamento, hasta el punto de cometer FRAUDE procesal. Pobre burro. “Todo cae por su peso”
Seguirán de aquí en adelante hasta las elecciones de 2024 la inteligencia artificial nivel 3, haciendo circo y teatro para descarrilar y como dice un chiste político, “hasta para encontrar una hermana perdida”, que los otros candidatos o competencia, habían perdido hace 20 años o no sabían que tenían.
Finalmente, en todo este contexto mexicanizado del miedo, en la política mal hecha, deja siempre dos experiencias muy importantes:
las mentiras caen vergonzantemente solas y desprestigian más a quien las creo. Solamente se persigue a quien se le TEME.
Para terminar, hay que recordar en la semana, “que el que es perico donde quiera es verde”, aunque no les guste a muchos.
Hasta pronto.