Por Pegaso
¡Se los dije! Odio siempre tener la razón, pero se los dije.
No voy a decir en esta columna lo que les dije, pero en serio que se los dije.
Lo que sí haré es hacer dos listas de cosas: La primera, lo que le gusta al pueblo Bueno y Sabio de México y la segunda, lo que no le gusta. Viene.
LO QUE LE GUSTA
1.- El desmadre
2.- El futbol
3.- La virgencita de Guadalupe
4.- Las narconovelas
5.- Los corridos tumbados
6.- Chingar a los demás
7.- No dejarse chingar por los demás
8.- Comprar a crédito
9.- La chela
10.- Asar pollo los domingos
11.- Comprarse una pantallota de televisión, aunque la familia no tenga ni para comer
12.- Comprarse un iPhone, o ya de perdido, un Samsung, a crédito, por supuesto
13.- Pedir prestado
12.- No pagar lo que pidió prestado
13.- Burlarse de las desgracias ajenas
14.- Echar piropos subidos de tono
15.- Echar mentiras de manera compulsiva
16.- Creerse las mentiras que escucha
17.- Tomar lo ajeno cuando nadie lo ve
18.- Pasarse todo por el arco del triunfo
19.- No meterse en pedos que no son suyos
20.- Querer mucho a su mamacita
21.- Sentirse mañoso
LO QUE NO LE GUSTA
1.- Que le quiten todo lo anterior.
Por supuesto, en el socialismo tipo Cuba, Corea del Norte o Venezuela, los gobiernos no van a permitir que los ciudadanos hagan lo que les de su re chingada gana y el que lo hace, simplemente lo desaparecen.
Fíjense.
Estaba una vez el finadito Fidel Castro dando un discurso en la Plaza de Revolución, en La Habana:
-¡Hermano’ cubano’!-decía. Nue’tro pueblo es muy dado a festejar, a bailá’ y a cantar, y eso no es posible en un país democrático y socialista como el nuestro. A partir de hoy vamo’ a prohibir la música en la radio, vamo’ a prohibir lo’ baile’, lo’ casino’ y todo tipo de celebración.
Se escucha un murmullo de desaliento.
Y continúa el discurso:
-Es así como vamo’ a hacer de Cuba una República fuelte, donde el trabajo sea la base del desarrollo. También vamo’ a prohibir que se tome ron en la isla, porque no estamo’ dejando nada para la exportación.
Otro murmullo desesperanzado, pero aún así, continúa: “Y también vamo’ a prohibir lo’ bongó’”.
Y al unísono todos contestan: “¿Qué quéeeee?”
-¡Que vamo’ a prohibir lo’ bongó’!
-¿Qué quéeeee?
-¡Que vamo’ a prohibir lo’ bongó’!
-¿Qué quéeeeeee?
-¡Que vamo’ a prohibir lo’ bongó’!… Y todo mundo se pone a bailar a ritmo de guaracha.
Ese es solo un cuento de los muchos que han contado los comediantes como Teo González, pero da a entender el grado de control que los gobiernos socialistas llegan a tener sobre lo que comen, lo que visten, lo que ven, lo que escuchan y hasta lo que piensan sus ciudadanos.
Por eso mejor nos quedamos con el refrán estilo Pegaso: “A proporcionarle volantía a la porción de textil!” (A darle vuelo a la hilacha).