Chihuahua, Querétaro, Baja California y Tamaulipas son los estados donde hay mayor riesgo de una crisis energética para las manufacturas.
Index se pronunció en contra de la propuesta de Reforma Eléctrica enviada al Congreso por el presidente López Obrador. (Cuartoscuro).
El Consejo Nacional de la Industria Maquiladora y Manufacturera de Exportación (Index Nacional) advirtió, en el marco de la discusión en torno a la Reforma Eléctrica, que la manufactura en varios estados encara una falta de energía que podría derribar su potencial de crecimiento.
“Hay estados donde hay carencia de energía y no podemos seguir creciendo […] Tenemos otros estados en los que conseguir energía no ha sido sencillo”, declaró el martes Luis Hernández, presidente de Index Nacional, tras su participación en el parlamento abierto sobre la Reforma Eléctrica.
Chihuahua, Querétaro, Baja California y Tamaulipas son los estados donde hay mayor riesgo de una crisis energética para las manufacturas, señaló Hernández. Todos ellos se cuentan entre los principales centros de manufactura y exportación del país.
El problema está en la distribución. Aunque la energía exista, no se cuenta con infraestructura suficiente para hacerla llegar a las fábricas, y no hay indicios de que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) planee invertir pronto en infraestructura de distribución.
Index se pronunció en contra de la propuesta de Reforma Eléctrica enviada al Congreso por el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO). El organismo está a favor del argumento de soberanía energética impulsado por Presidencia, pero rechaza la necesidad de imponer trabas a la inversión privada en el sector.
“Que permitan a la iniciativa privada invertir. El tema que tenemos con CFE es que la inversión que se requiere no la tiene CFE; sería entrar a esquemas en los que se apalancaría más el país”, explicó Luis Hernández.
La IP está dispuesta a invertir en la infraestructura necesaria, añadió, pero las nuevas reglas podrían asfixiar ese entusiasmo y agravar la falta de energía, sobre todo en estados del norte.
La postura de los inversionistas ya es de cautela y desilusión. El presidente de Index refirió casos en los que empresarios tanto nacionales como extranjeros se acercan a las autoridades federales para impulsar inversión en infraestructura, recibiendo respuesta entre 12 y 18 meses después de su solicitud.
Index no es el único órgano que se muestra preocupado por la reforma en su versión actual. Cámaras empresariales, analistas económicos, expertos del sector energético y hasta legisladores extranjeros han dejado claro su rechazo.
Se espera que la propuesta de Reforma Eléctrica se vote en el Congreso en marzo. Mientras tanto, representantes de la IP y del gobierno federal discuten sus méritos y riesgos en una serie de foros bajo el formato de parlamento abierto.