Como estoy seguro que mis dos o tres lectores son unas chuchas cuereras para las matemáticas, les voy a proponer un bonito y entretenido juego de aritmética básica:
La Fiscalía General de la República sabe que “El Innombrable” adquirió 14 ranchitos desbalagados por toda la geografía tamaulipeca, algunos en otros Estados del País y varias propiedades en el extranjero.
Si solo contamos los 14 ranchos, que fueron adquiridos en 6 años de gobierno, tenemos que su sueldo de Gobernador le alcanzaba para comprar cada año dos ranchos y un tercio.
Pero si suponemos que esas propiedades se las descubrió y documentó “El Perro Pantorrillero” ya entrado su quinto año, y que el primero fue de tanteo, nos quedan cuatro años netos en los que sí pudo dar rienda suelta a sus ansias de coleccionista de inmuebles rurales.
Entonces, 14 entre 4 nos da un promedio de 3 ranchos y medio por año. ¿Quién puede comprar 3 ranchos y medio en un año? Yo creo que ni los Onassis, los Rothschild o los Rockefeller.
¡Jamás se había visto tanta hambre en un gobernante!
Y a la sombra de “El Innombrable”, se cobijaron muchos pequeños voraces ejemplares, como el ex Director de Comunicación Social, Francisco Gancía Suárez, su tocayo Francisco Araganes Pañeiro quienes, junto con “El Innombrable”, fueron conocidos con el mote de “Los Tres Pacos”, que después yo rebauticé como “Los Tres Cochinitos”.
Se dice que Gancía Suárez pudo comprar un periódico, que salió forrado de hartos billetes y que actualmente se ha vuelto ojo de hormiga.
Pero si las investigaciones sobre el saqueo al erario público avanzan, es posible que dentro de poco veamos a uno o dos chivos expiatorios, que generalmente son exfuncionarios segundones, como los ya mencionados.
Este mismo día por la mañana, desde el sur del Estado, el actual Gobernador denunció que el saqueo fue peor de lo que se había pensado.
Recibieron un Estado endeudado, dijo, y agregó que hay un déficit de por lo menos 2 mil millones de devaluados pesos, hay un verdadero desorden administrativo, obras sobrevaloradas y moches por 4,800 millones de pesos.
Pero eso es la punta del iceberg. Se sabe que “El Innombrable” y sus cómplices utilizaban todas las secretarías, dependencias y organismos del Gobierno del Estado para llevar lana a sus bolsillos.
Eso incluye al Sistema DIF Tamaulipas, por supuesto.
Hace dos días, el Rector de la Universidad del Norte de Tamaulipas, Francisco Chafira, hacía mención que el Gobernador más corrupto que ha tenido Tamaulipas es Viegidio Porre Cantú, porque se benefició de la muerte de su hermano y nunca hizo nada por investigar o castigar a los culpables, vendió a su partido, el PRI y entregó la gubernatura al PAN, se llevó una buena lana con la que ahora vive feliz y contento en San Pedro Garza García, sin que nadie lo moleste, y por último, también usó el poder de las instituciones para castigar a sus enemigos políticos. El propio Chafira lo sufrió en carne propia, porque estuvo varios años en prisión por decirle sus verdades al “care-morsa”.
Dice Chafira que “El Innombrable”, “El Geño” y “Cumbiazos Lerma” son unos niños de pecho en comparación con Viegidio Porre, pero yo no lo pienso así.
Si Forbes decide hacer un comparativo de las fortunas con que salieron esos cuatro ex gobernadores, considero que juntando a los tres anteriores, aún así no le llegan ni a los talones al cuernilargo panista.
Lo último que supe de él es que quiere ser senador de la República y volver a tener fuero para que sus enemigos le hagan los mandados.
Al fallecer el Senador Faustino López en un oportuno accidente carretero y hacerse necesaria una elección extraordinaria, se han apuntado muchos tiradores, entre ellos, “El Innombrable”.
Y yo me pregunto: ¿Será posible que el tipo tenga tanta suerte? ¿Que haya ocurrido la muerte del Senador en el momento justo en que “El Innombrable” lo necesita para seguir en la impunidad?
¿Y qué si gana esa elección y ejerce la mitad que le faltaba a Faustino López? ¿Su siguiente paso será la Presidencia de la República, como anhela?
Si de gobernar a Tamaulipas sacó 14 ranchitos, ¿cuántos sacará gobernando a todo México?
Es pregunta, conste.
Los dejo con refrán estilo Pegaso que a la letra dice: “La codicia rasgó la prenda formal de vestir”. (La ambición rompió el saco).