Por Pegaso
Algunos de los objetivos de la Agenda 2030 ya son medibles.
En los últimos años se ha generalizado el uso de energías limpias, como la solar y la eólica para sustituir a los combustibles fósiles, altamente contaminantes.
Esto es algo bueno, si tomamos en cuenta que se ha disminuido el ritmo de polución y por lo menos se ha logrado detener en una pizca el calentamiento global y el cambio climático.
No sé si a estas alturas el daño que le hemos hecho al planeta sea irreversible, pero por lo menos las mediciones ya arrojan datos positivos.
Otro logro de la Agenda 2030 es la disminución de la población.
Se considera que la población mundial mantendría su crecimiento si cada mujer tuviera 2.2 hijos. No obstante, en la última evaluación, el porcentaje es ligeramente inferior.
Esto nos indica que cada vez somos menos. En un video de Tik Tok que vi ayer se decía que somos unos mil millones de personas menos en el mundo.
La verdad, yo no lo creo. Ya hemos superado los 7 mil millones de seres humanos en el planeta y vamos para arriba.
Lo que sí veo plausible es que las políticas de la Agenda 2030 están dando resultados. Una de ellas, como dije líneas arriba, es evitar que siga la contaminación y se desacelere el cambio climático. La otra, disminuir la población mundial, como lo recomendaba hace más de dos siglos el demógrafo y economista Thomas Maltus.
Pandemias, terremotos inducidos, guerras, tsunamis y otras calamidades, han provocado la muerte de millones de personas, pero eso no es suficiente. Es como quitarle un pelo a un gato.
¡Noooo! Hay que buscar otra forma.
Por ejemplo:
1.- Impulsar la cultura lésbico-gay, ya que no es posible que se reproduzcan hombre con hombre y mujer con mujer.
2.- Inculcar en los jóvenes el deseo de permanecer soltero y sin compromisos. Esto se refleja en estadísticas reales, puesto que cada vez hay menos matrimonios y más divorcios.
Aparte, en países europeos la tasa de crecimiento ya es negativa, lo que significa que hay una población de adultos mayores superior a la de jóvenes y niños.
En otro video que subió una tik toker que se identifica como @rocio.martinez466, menciona el enorme impacto que está teniendo entre los adolescentes el contenido de los libros de texto gratuitos que se entregan en las escuelas de nivel básico.
Según afirma, en el libro de 5to. Grado llamado “Proyectos Escolares”, en la página 250, se puede leer un proyecto denominado “Todx somos lo mismo”, donde se afirma que la identidad de género es como cada persona se percibe a sí misma, no en función de su sexo biológico.
Lo que sugiere que los programas escolares de México está alineado con los objetivos de la Agenda 2030 para disminuir la población.
Si alguien vio la película “Avengers: Endgame”, el titán Thanos consigue el Brazalete del Destino, y con un chasquido borra a la mitad de la población humana y de todo el Universo.
El chasquido de la vida real se llama “Agenda 2030”, y está inspirado en los tratados de Camus ya que, según el demógrafo inglés, la población mundial se duplica cada 50 años y es necesario implementar políticas para desacelerar su crecimiento.
¿Guerras? ¿Tsunamis? ¿Violencia? ¿Terrorismo? ¿Terremotos? ¿Huracanes devastadores? ¡No, hombre! ¡Agenda 2030!
Vámonos con el refrán estilo Pegaso: “Perecen gran cantidad de individuos que anteriormente no perecieron”. (Están muriendo muchos que no habían muerto antes).