Cd. Victoria, Tamaulipas.- El diputado de Morena Isidro Vargas Fernández aseguró que la toma del pleno y el romper el quórum son «prácticas políticas parlamentarias permitidas», aunque no estén enmarcadas en ninguna Ley, esto luego de que la sesión antepasada él y otros morenistas sustrajeron micrófonos y documentos de la Mesa Directiva en plena sesión.
Justificó sus acciones al decir que estas prácticas se dan en todos los congresos o cámaras del país y también a nivel mundial, aunque «de una manera pacífica, sin llegar a las agresiones físicas, entonces fue lo que hicimos nosotros sin llegar a una agresión física o verbal».
Sin embargo, la toma de la Mesa Directiva protagonizada por él, y por el legislador José Alberto Granados Fávila y la legisladora Magaly Deandar Robinson se dio en medio de empujones, jaloneos y gritos.
«Lo tomamos precisamente porque era el doble blindaje del gobernador, que decida la Corte, la Corte ya tiene la controversia, ya tiene la situación jurídica, ya la Cámara de Diputados federal señaló que no tiene fuero, entonces, el asunto está en la Suprema Corte», dijo.
Así pues, Vargas Fernández insistió en que sus acciones estuvieron justificadas en tanto considera que el Congreso de Tamaulipas no debe de intervenir en el caso del desafuero, ya que, reiteró, deben de ser los órganos jurisdiccionales los que resuelvan el caso en definitiva.
En este sentido, dijo sobre el extrañamiento que se solicitó por parte del grupo parlamentario del PAN en contra del él y los otros dos diputado, el cual fue turnado a la Junta de Coordinación Política, será contestado bajo el argumento de que este órgano legislativo no tiene facultad para dictaminar iniciativas, desde su percepción.