Se trata de niños y adolescentes de cero a 18 años, por lo que en cada unidad de salud se aplica una cédula de búsqueda intencional para determinar si existen signos y síntomas de cáncer en ellos, y se aplica entre los menores que acudan a consulta por primera vez.
Dicha cédula se aplica en cualquiera de los 15 centros de salud con que cuenta la Jurisdicción Sanitaria de la ciudad, la que es valorada por un médico, y al momento en que sean detectados más de tres signos como sangrado de encías, una epistaxis, sudoración excesiva en las noches o dolor en cualquier área del cuerpo.
“Son varios tipos de cáncer, pero en los tres primeros tipos puede ser leucemia, tumores del sistema nervioso central, y tumores óseos en los adolescentes. Pero se capturan aquí pocos niños porque muchos de los que se detectan se capturan si llegan a tener más de cuatro signos”, explicó la especialista.
De ser así, dijo que se mandan de inmediato a un hospital de segundo nivel para su tratamiento y realización de los estudios pertinentes, porque en la Jurisdicción no se clasifica la enfermedad, ya que solo se previene y se envía a los pacientes, del hospital a las Unidades Médicas Acreditadas, las que se ubican en ciudad Victoria o Reynosa.
Una vez detectada la enfermedad, el registro se envía al Estado, y de allí a la Secretaría de Salud federal, por lo que el seguimiento se realiza para saber si está en tratamiento, si se cura e incluso, saber si hay una defunción, “pero no hemos tenido defunciones en este año, y por eso es la función de darle seguimiento a cada casi para saber su estado de salud”, explicó.