La inflación se desaceleró a principios de diciembre, por lo que los precios al consumidor se ubicaron en 3.72 por ciento, dato por debajo de las proyecciones de los analistas.
Los precios al consumidor subieron un 3.72 por ciento en la primera quincena de diciembre frente al mismo periodo del año pasado, informó el martes el instituto nacional de estadística.
El dato se ubicó por debajo de la mediana del 3.88 por ciento de las proyecciones de los analistas encuestados por Bloomberg y del 3.99 por ciento registrado a fines de noviembre.
La inflación subyacente, que excluye alimentos y combustibles volátiles, se ubicó en 4.34 por ciento, por debajo del 4.54 por ciento registrado a fines de noviembre. La meta del banco central de México es de una inflación del 3 por ciento, con un margen de más o menos 1 punto porcentual.
Banxico, como se conoce al banco, recortó la tasa de referencia al 7 por ciento la semana pasada, tal como esperaban todos los economistas encuestados por Bloomberg. Aun así, Jonathan Heath —el único miembro de la junta que votó por mantener la tasa— ha dicho que la proyección de inflación del 3 por ciento para el tercer trimestre de 2026 no es realista y amenaza la credibilidad de la institución.
Victoria Rodríguez Ceja, gobernadora de Banxico, dijo en una entrevista publicada esta semana por el diario El Financiero que la economía mexicana no está experimentando presiones generalizadas sobre los precios. Además, afirmó que el balance de riesgos para la inflación es menor que el observado entre 2021 y 2024.
Una economía débil y la apreciación de la moneda ayudarán a mitigar la inflación el próximo año, señaló en la entrevista.
Entre los factores que contribuyeron a la desaceleración de la inflación se destacó la caída del 5.66 por ciento en los precios de frutas y verduras, mientras que los productos energéticos subieron apenas un 0.28 por ciento. En contraste, los precios de los productos pecuarios aumentaron un 6.36 por ciento.

