Cd. Victoria, Tamaulipas.-Cuando el apoyo es genuino se nota a primera vista, y esto es lo que transpiró por todos sus poros hoy el magisterio tamaulipeco que refrendó con su asistencia al SARTET el voto de confianza que el viernes pasado le dio a Arnulfo Rodríguez Treviño para elegirlo nuevamente como secretario General de la Sección 30 del SNTE en Tamaulipas.
Desde todos los municipios del estado, los maestros llegaron a la capital para asistir a la toma de protesta y prodigar el «¡Arnulfo, Arnulfo! y el ¡Sí se pudo, sí se pudo! decenas de veces, convirtiéndolos en un sólo grito de goce por la nueva etapa que inicia en el sindicato magisterial.
La elección es histórica por doble flanco, porque es la primera ocasión desde 1943 que un maestro encabeza por segunda vez su Comité Ejecutivo Seccional, y porque también por primera ocasión se eligió a un secretario General vía el voto libre y secreto de cada uno de los trabajadores de la educación en el estado.
Otro dato interesante es que de los más de 60 mil trabajadores que tuvieron la oportunidad de participar en la elección sindical, cerca de 13 mil eran jubilados, de los cuales aproximadamente 6 mil 500 hicieron válido su voto.
Tras la toma de protesta y la entrega de los estatutos y banderas, Arnulfo Rodríguez Treviño hizo suya la tribuna del presídium a través de un mensaje directo, sin ambages, en el que recordó que hubo obstáculos que sorteó para poder participar en la contienda interna.
“Quiero decirle también a Rigo, a ti te consta Rigo, que aquí nosotros venimos de paso y en la vida hay que aprender, a veces no nos preguntamos el por qué, falta la respuesta, yo quiero saludar a mis amigos maestros que cumplieron un compromiso, no todo es un acierto”, dijo sobre el Comité Ejecutivo Seccional saliente.
Esto luego de que los maestros abuchearon hasta en tres ocasiones, como diría la célebre canción de Paquita la del Barrio, a Rigoberto Guevara Vázquez, quien hoy concluía su cargo como secretario General de la Sección 30.
Arnulfo recordó que la pandemia primero, luego la política e incluso hasta los comentarios de quienes le dijeron que ya estaba viejo para contender, se levantaron como grandes paredes que tuvo que escalar para pasar del otro lado.
“Y aquí estoy”, dijo para luego escuchar el resonar de las voces de los maestros que no se cansaban de regalarle porras, las cuales también se oyeron alto y nítido cuando dijo que “Ya llegó el tiempo”.
Además, celebró que el presidente Andrés Manuel López Obrador haya tenido la visión de impulsar una reforma laboral de acuerdo a lo pactado con Estados Unidos y Canadá en el T-Mec para que la democracia sindical se afincara para siempre en los gremios del país.
En 2007, fue más atrás en su memoria, el SNTE en Tamaulipas también hizo historia cuando se logró sacudir la imposición que se buscaba instaurar desde Los Pinos, vía el presidente Felipe Calderón, una dirigencia sindical que logró derrotar con la elección de delegados que le dieron la confianza de dirigir el Comité Ejecutivo Seccional por primera vez.
Así pues, con sencillez, recordó que viene del Ejido El Charco, municipio de Villagrán, y de ahí partió todo lo que es hoy, gracias a enseñanzas de su familia y personas que estuvieron cerca de él como su maestra de sexto grado de primaria, quien hoy estuvo presente en la ceremonia de toma de protesta.
Y como hombre de fe que es, dijo que llegó hasta hoy a dirigir nuevamente el destino de la Sección 30 gracias a que no se dio por vencido pero también con la ayuda de Dios, porque sin él no habría ganado la contienda.
Por último, al gobernador Américo Villarreal Anaya, presente en la ceremonia, le dijo que contaba con todo el apoyo del magisterio, “Doctor, si usted nos da el 20, nosotros le damos el 80, y si nos da el 30, nosotros le damos el cien”.